Uno de los astronautas de la NASA que regresó recientemente a la Tierra tras permanecer atrapado en la Estación Espacial Internacional durante más de nueve meses, declaró a principios de esta semana que asistir a los servicios religiosos de forma remota lo sostuvo espiritualmente mientras permanecía en órbita.
Barry “Butch” Wilmore, durante una conferencia de prensa en Houston con su compañera astronauta Suni Williams, declaró que mantener la comunión virtual con la Iglesia Bautista Providence —su iglesia natal en Pasadena, Texas— fue vital, ya que su viaje originalmente planeado de ocho días a la EEI, se prolongó durante 286 días debido a problemas técnicos.
[Estamos en WhatsApp. Empieza a seguirnos ahora]
Wilmore, anciano de la iglesia a la que asiste con su familia durante 17 años, dirigió devocionales y cantó “Sublime Gracia” junto a sus compañeros astronautas, según declaró a CBN en una entrevista reciente.
Reciba GRATIS nuestras últimas noticias
Suscríbase para recibir un boletín con las noticias más destacadas (¡además de ofertas especiales!) de The Christian Post. Sea el primero en enterarse.
Durante la rueda de prensa, comentó que también transmitió los servicios desde la Iglesia Bautista Grace en Mount Juliet, Tennessee, donde uno de sus amigos es pastor y anciano.
“La Palabra de Dios me llena continuamente; la necesito”, dijo Wilmore cuando se le preguntó por qué era importante para él asistir a los servicios desde el espacio. “Mis pastores son los mejores pastores dentro y fuera del planeta, en este caso. Y conectar y adorar con la familia de mi iglesia fue vital. Es decir, es parte de lo que me motiva”.
Al señalar que la vida de las personas está “ligada a muchas cosas”, Wilmore dijo: “Para mí, es la fe en mi Señor y Salvador, Jesucristo. Él es el principio y el fin. Él nos perdona”.
Él nos enseña cuando dice en Su Palabra que debemos estar contentos en todas las situaciones, porque Él está llevando a cabo Su plan y Sus propósitos para Su gloria y nuestro bien, y lo creo porque la Biblia lo dice.
“No significa estar siempre feliz, no significa que no haya dolor, sino contentamiento y saber que Dios tiene el control; un Dios soberano está en control, llevando a cabo Su plan y Su propósito”, añadió Wilmore sobre el contentamiento.
“¿Quién ha vivido una vida sin dolor? Es decir, nadie. Esa es la naturaleza de la existencia. ¿Quién ha vivido una vida sin tristeza? ¿Quién ha vivido una vida sin desafíos? Nos hace crecer, aprendemos de ello, y ese es el enfoque que intento extraer: ¿Qué me está mostrando el Señor?”
El pastor Tommy Dohn, de la Iglesia Bautista Providence, dijo que la congregación de Wilmore estaba emocionada de verlo cuando regresó en persona, según KPRC.
“Hubo algo de emoción tras su llegada, pero él no quiere ser el centro de atención”, dijo Dohn. “Aunque todos estamos un poco deslumbrados”.
Con la ayuda de la cápsula Dragon de SpaceX, los astronautas regresaron de la EEI el 18 de marzo.
Elon Musk, director ejecutivo de SpaceX, ha afirmado que la administración Biden rechazó su oferta de ayuda para recuperar a la tripulación para evitar que Musk, quien era en ese entonces un abierto partidario de Trump, obtuviera una victoria visual durante la temporada electoral.
Durante la conferencia de prensa a su regreso, Wilmore se mostró diplomático al ser preguntado si alguna vez se sintió atrapado, abandonado o dejado atrás.
“Cualquiera de esos adjetivos tiene una definición muy amplia”, dijo Wilmore.
“Así que, en ciertos aspectos, estábamos atrapados, en ciertos aspectos, tal vez abandonados, pero según cómo lo plantearon, que nos dejaron olvidados en órbita, no estábamos ni cerca de eso”.
Mientras estaba en órbita, Wilmore dijo previamente que lo que declaró Musk era “absolutamente real”, aunque señaló que no estaba al tanto de los detalles de ninguna reunión a puerta cerrada acerca de su terrible experiencia.
