Hamás ha entregado este viernes a los mediadores su respuesta al plan de paz para Gaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. En un comunicado ha asegurado que acepta liberar a los últimos rehenes aún retenidos en la Franja, 48 (solo 20 de ellos con vida), pero pide “iniciar inmediatamente negociaciones a través de los mediadores para debatir los detalles”. También se muestra conforme con que un gobierno tecnocrático palestino administre el territorio, pero elude en su respuesta cuestiones espinosas como el mecanismo internacional de supervisión, presidido por Trump, o el desarme de la milicia.
La Casa Blanca ya ha anunciado que dará un mensaje institucional al respecto desde el Despacho Oval, pero mientras Trump ha publicado un mensaje en su red social Truth en el que acoge positivamente la respuesta del grupo islamista: “Basándome en la declaración que acaba de emitir Hamás, creo que están preparados para una paz duradera. Israel debe detener inmediatamente los bombardeos sobre Gaza, para que podamos rescatar a los rehenes de forma segura y rápida. En este momento, es demasiado peligroso hacerlo. Ya estamos discutiendo los detalles que hay que resolver. No se trata solo de Gaza, se trata de la paz tan ansiada en Oriente Medio”.
Trump había impuesto en esta misma jornada una cuenta atrás para que Hamás aceptara ese plan de paz de 20 puntos que presentó públicamente el pasado lunes, ya con el visto bueno del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, que introdujo cambios de último minuto en el borrador definitivo. En un mensaje, también en Truth, el republicano había dado al grupo fundamentalista palestino un ultimátum que expiraba a las 18.00 horas del domingo, hora de Washington (00.00, hora peninsular española), para que respondiera y amenazaba con un “infierno” si no aceptaba la propuesta. “Habrá paz de un modo u otro”, escribió.
La debilitada Hamás, sin apenas aliados y presionada también por los países árabes para aceptar el plan de Trump, busca evitar en su respuesta motivos para que Israel y EE UU desencadenen el “infierno” con el que ha amenazado Trump este viernes. De hecho, no solo agradece los “esfuerzos árabes, islámicos e internacionales” para poner fin al conflicto, sino también expresamente los del presidente de EE UU.
El movimiento islamista acepta la liberación de los últimos rehenes “de acuerdo con la fórmula de intercambio incluida en la propuesta del presidente Trump, siempre que se den las condiciones para el proceso”, que en el documento son la “suspensión de todas las operaciones militares, incluidos los bombardeos aéreos y de artillería”.
En la comparecencia ante la prensa con del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, tras una reunión de ambos en el Despacho Oval, Trump señaló que, si Hamás lo aceptaba, tendría un máximo de 72 horas para entregar todos los rehenes a la vez.
Una vez liberados, Israel excarcelará a 1.700 gazatíes detenidos en los arrestos masivos efectuados por el ejército israelí en Gaza desde el 7 de octubre de 2023, entre ellos todas las mujeres y niños, y 250 presos condenados a al menos una cadena perpetua por el uso de la violencia en el marco del conflicto palestino-israelí. Son casi todos (cerca de 300) los encarcelados a perpetuidad, aunque en anteriores canjes Israel ha elegido quiénes, descartando aquellos que el nacionalismo palestinos ha encumbrado como héroes.
Por cada cadáver de rehén israelí entregado, el Gobierno de Netanyahu hará lo propio con los restos de 15 de los gazatíes sin vida cuyos cadáveres guarda.
Hamás no menciona uno de los puntos más polémicos: el organismo internacional que presidirá el propio Trump y en el que participará el ex primer ministro británico Tony Blair para supervisar que Hamás no tendrá capacidades bélicas. Se limita a subrayar su “aprobación a entregar la administración de Gaza a un organismo palestino de tecnócratas independientes, con base en el consenso nacional palestino y el apoyo árabe e islámico”.
El plan de Trump señala que “Gaza será gobernada por un Gobierno transitorio temporal de un comité palestino tecnocrático y apolítico, responsable de la gestión cotidiana de los servicios públicos y los municipios”,
Esta es la primera respuesta oficial de la milicia palestina a una propuesta de paz que solo incluye un plazo concreto: el de 72 horas para la liberación de los rehenes israelíes aún cautivos en Gaza. El lunes, Hamás afirmó que no había tenido acceso al documento antes de que la Casa Blanca diera a conocer los 20 puntos definitivos, retocados en el último momento para adaptarlos a las exigencias israelíes. El plan de paz, de apenas tres folios, se publicó inmediatamente antes de una comparecencia conjunta de los dos dirigentes.
El miércoles, fuentes de la milicia citadas por medios saudíes, reclamaron que el plan incluya plazos concretos para la retirada de las tropas israelíes de Gaza, una de las principales demandas a la que Hamás ha condicionado en el pasado cualquier posible tregua. El grupo islamista también venía aspirando a conservar parte de su armamento y reclamaba una enmienda al plan de Trump que distinga entre armas ofensivas, que entregaría, y defensivas, que pretende conservar. Ninguna de esas demandas aparece en su respuesta.